top of page

Raúl Marmolejo: “La radio fue una escuela básica desde mi infancia”

Updated: Oct 9, 2023

Raúl Yaacov Schwartz Marmolejo nació en la capital colombiana y sus orígenes paternos provienen de Israel. De ahí, su segundo nombre y su primer apellido. Por esta razón, un influyente hombre de radio le sugirió en su momento, utilizar su primer nombre y su apellido materno como nombre de marca. Desde ese entonces, de hecho desde muy joven, Raúl Marmolejo, es el nombre que en la radio colombiana, muchos conocen.


Desde que tiene uso de razón, Raúl Marmolejo, ha estado inmerso en el maravilloso y fabuloso mundo de la radio. Definitivamente en la vida de este comunicador y publicista, aplica perfectamente aquello de que la radio es su mejor compañía. Incluso para él, la radio es su mejor amiga.


En algún momento de su vida, Raúl Marmolejo fue premiado por su dedicación a la radio y fue invitado a ser parte de aquel mundo imaginario que siempre escuchaba pero que no conocía y de esta forma personalidades importantes le brindaron toda la confianza para que hiciera realidad su encanto por la radio.


Es sorprendente escuchar a un hombre, todavía muy joven, hablar y recordar con mucha propiedad nombres y anécdotas de la radio colombiana. Y de estas historias, no pueden faltar las que él por experiencia propia vivió en Todelar, aquella gran escuela de casi todos y sin excepción la de él también.


Raúl Marmolejo.



Por: Germán Posada



Su papá es originario de Israel. ¿Por qué inmigró a Colombia?

Mi papá es filósofo y economista y trabajaba para una empresa de seguridad israelí, vino a Colombia y visitando a un amigo en el Hospital San Juan de Dios conoció a mi mamá que es de origen vallecaucano, se enamoraron y a los pocos meses se casaron.

Poco después del Mundial del 86 mi papá se tuvo que ir de Colombia por amenazas.


¿Supongo que su apellido “Schwartz” es tema de conversación en los medios de Colombia?

En Israel, Jerusalén, el idioma que se habla es el hebreo, mi apellido proviene de los judíos que inmigraron hacia Europa después de 1492. Yo tengo conocimiento en el lenguaje Yiddish que es el hebreo de esa corriente y además en inglés y algo de alemán. Mi padre también tiene descendencia austriaca.



Tal vez ha viajado a Israel. ¿Qué similitudes y diferencias establecería entre Israel y Colombia?

Los judíos no somos una religión, somos un pueblo que estamos esparcidos por todo el mundo y algún día esperamos estar todos reunidos en Jerusalén.

Básicamente la Constitución es la Torah ó el antiguo testamento. Yo he visitado Israel en dos ocasiones, luego de los sucedido con mi papá, mi mamá decidió quedarse en Colombia porque no quería un compromiso tan aferrado a los mandatos bíblicos. Mi padre si es muy aferrado a la Biblia.

Israel es un país supremamente moderno, de gente muy innovadora y básicamente la similitud que tiene con Colombia es por la religión católica que proviene del judaísmo y definitivamente el amor por la familia que siempre será lo más importante.



¿Qué lo descrestó, qué lo enamoró de la radio?

Yo me crié como hijo único hasta los 11 años y no tenía mucho contacto con amigos diferentes a los de mi comunidad y la radio era el único mejor amigo que yo tenía. Básicamente fue mi escuela y mi universidad. Yo entré a la radio porque era mi mejor amiga. Mientras yo jugaba en el patio de mi casa con un balón de fútbol pegándole a una pared siempre me acompañaba la radio.

A mí me impresionaba mucho el mundo de la imaginación que me daba la radio. Desde que tengo memoria aproximadamente desde los 4 años de edad escuchaba las radionovelas, la serie Kalimán, programas como Solución a su problema, también programas de humor, música tropical y romántica en español, aquella mal llamada música de plancha, la lectura de noticias me impresionaba demasiado. A esa edad yo estaba al tanto de lo que pasaba en el mundo. Me sabía los nombres de los presidentes y ministros. Yo imitaba a los locutores y lo digo con el mayor de los orgullos, la radio fue una escuela básica desde mi infancia que me desarrolló la imaginación para luego ser un publicista y experto en mercadeo.


¿Y a quién recuerda cómo sus ídolos de radio de aquella época?

Son muchos. La voz que más me impactaba era la de Julio Nieto Bernal. Era mi ídolo y mi gran maestro de la imaginación, yo quería ser como él cuando fuera grande. Recuerdo estupendas voces femeninas como la de Judith Sarmiento, Yolanda Gómez, las periodistas Margarita Vidal, Amparo Peláez, Olga Behar, Gloria Valencia de Castaño. Como no recordar personalidades como: Manolo Villareal, Yamid Amat, Álvaro Castaño Castillo, Gaspar Ospina, la gran mayoría fueron empíricos y autodidactas pero unos profesionales a carta cabal.

Después llegarían Gustavo Niño Mendoza, Juan Harvey Caycedo, Alberto Piedraita Pacheco, Otto Greiffesten, los juveniles como Armando Plata Camacho, Camilo Pombo, Manolo Bellon. Definitivamente fue una época en donde el que trabajara en radio tenía que tener muy buena voz.

Fue un sinfín de voces entre los 60s y los 80s que han llamado -la época de oro de la radio colombiana- en donde decían que en Colombia se hablaba el mejor español del mundo.


¿Podría decir que para usted La Súper Estación fue el motor de partida para iniciarse en la radio?

Yo hablo de mi experiencia profesional desde el 1 de septiembre del año 87 cuando recibí mi primer salario en Todelar. Son 34 años de experiencia. Antes de esto fue un año y medio en el que formaba parte de la radio y todavía iba al colegio.

A mí me impactaba mucho lo de la comunicación telefónica, era el mejor oyente y memorizaba cada cosa anotándola para participar en los concursos. Cuando salió el fenómeno del famoso programa El Zoológico de la Mañana en 88.9 la Súper estación, los locutores eran Fernando Pava, Jesús Benavidez, Carlos Cadavid, conocido como El Bichito, Hernando Romero Barliza “El Capi”, Sandra en ese entonces la secretaria y ahora actual esposa de Hernando Romero Barliza y Jaime Orlando Prado, uno de mis mentores, yo vivía las 24 horas escuchando la emisora y a la hora que fuera llamaba a participar en los concursos y ganaba seguido.

Un día en 1986, mis papás me llevaron por primera vez a la emisora y Fernando Pava y Jaime Orlando Prado me conocieron y me ofrecieron trabajar en radio. Recuerdo que les dije que no porque no pronunciaba bien la letra R a lo que me dijeron que no me preocupara y fue así como entré a 88.9. Jaime Orlando Prado me enseñó lo que era una emisora por dentro y terminé colaborándole desde mi casa en un programa que él tenía a partir de las 10 de la noche con información sobre artistas, ese fue mi primer año y medio en la radio.

Lo que yo hacía era básicamente turnos de bombillo y asistente, esto era por conocer y aprender.


Guarda una inmensa gratitud por Todelar como su mejor escuela de radio. ¿Cómo recuerda a sus mentores?

Gracias a Dios a mí se me presentó la oportunidad de irme para Todelar en el momento cuando en 88.9 trajeron tantas estrellas de la radio para dirigir, entre ellos a Oscar Tito López de Veracruz Estéreo y también incursionó Alejandro Villalobos. Yo no me consideraba como tal porque además no tenía la edad, yo siempre fui muy menor a la gente con la cual trabajé.


En Todelar, Germán Tobón me dio muchos consejos administrativos, me sugirió utilizar mi nombre Carlos y mi apellido materno Marmolejo como mi nombre artístico. Julio Nieto Bernal, con la elegancia y la buena estructura. Carlos Arturo Tobón Caín, su actual presidente, con quien tuvimos una gran empatía y por eso logramos tener un buen equipo que le cambió la imagen a Todelar. Armando Plata Camacho con la mística, pronunciación y vocalización que siempre lo han caracterizado. Mis respetos también para Luis Guillermo Troya, Juan Carlos López quien trabaja actualmente en CNN, él fue mi primer profesor de inglés y me enseñó a pronunciar las canciones. También a Jaime Ortiz Alvear.

Mi gran éxito ha sido formar parte del grupo que diseñó La X y convertirla como marca, de hecho ese fue mi proyecto en la universidad, volver la radio como producto, no como servicio social ni medio de comunicación, sino como marca. Esto está consignado en los archivos de mi universidad, de hecho esto me sirvió de puente para ser profesor universitario enseñando formatos de radio en donde me he especializado.

La X todavía se mantiene en su formato original y fue la primera en tener un nombre con una letra, de ahí otros copiaron formatos como La Z ó La W, pero la primera y en muchos temas de mercadeo aplicados a la radio no se los pueden quitar a Todelar.


Creo que con Todelar se hace muy reiterativo para muchos el hecho de que esta empresa haya perdido mucho dentro de su calidad y programación. ¿Usted qué opina de la Todelar actual?

Me parece que en todo esto juega un papel muy importante lo que fue Todelar en alguna época en Colombia y la nostalgia de recordar aquellos años dorados de nuestra radio ha resultado muy difícil de poder superarla.

También es obvio que la temática de ganar plata por los espacios arrendados a personas que no tienen idea de hacer radio y llenándolos con contenidos de muy bajo nivel y lo mismo para espacios políticos, han hecho definitivamente que la calidad en la radio desaparezca.

Pero esto no ha pasado solamente en Todelar, también sucedió con Caracol, RCN, Radio Súper, mejor dicho en todas las frecuencias de AM en Colombia porque se volvieron mercaderes y además comenzaron a hacer programas centralizados desde Bogotá y con emisión nacional para no pagar ni siquiera el turno de un bombillo.

Creo que la radio debería volver a especializarse por sectores.

Usted es un hombre de radio reconocido en el formato de la radio musical juvenil y además Disc-jockey. ¿Para usted quienes pueden conformar esa lista de los Disc-jockeys en Colombia que abrieron el camino en el formato de la radio juvenil colombiana?

Algo que aprecio muchísimo es que en Todelar, siempre consideraron que yo tenía madera para ser Disc-jockey.


Cuando llegó el fenómeno de la radio juvenil en Bogotá existía una sola emisora en el dial 610 AM que se llamaba Radio Tequendama. Ahí fue en donde yo conocí la palabra Disc-jockey y comencé a escuchar música en inglés. El locutor estrella era Jairo Alonso Vargas, recuerdo que hacía un programa en la mañana que se llamaba Buenos Días Viejo Sol y otro de los locutores era el locutor Gonzalo Ayala Naranjo, con una hermosa voz.

Pero mi referencia histórica en la radio como el primer Dj que tuvo Colombia en la emisora Radio 15, es Alfonso Lizarazo. Carlos Pinzón también está en esa línea, pero mi referencia como tal es Alfonso Lizarazo, el fue el primer pincha discos que se salió del vidrio para presentar una canción. Con el paso del tiempo pude conocerlos porque mi mamá me llevaba a los programas de televisión que presentaba Carlos Pinzón El Club de la Televisión y a Alfonso Lizarazo como el video- jockey juvenil de la época, haciendo el programa Baila de Rumba.


En mujeres, Lina Botero, quién fue nuestra primera sensación de lo que era MTV, con un estilo totalmente impresionante.

Armando Plata Camacho, mi maestro, fue Guinness World Records con Willian Vinazco Ch en Radio Tequendama siendo los primeros Djs en Colombia en durar una semana ininterrumpida haciendo radio. Como director, nombraría a Fernando Pava Camelo, porque hasta ahora no se le ha reconocido el mérito, él era el propietario de la emisora, tenía voz y estilo pero además apostó, innovó y trajo ideas de otro lado. El Morning Show es la copia de un programa de la Z100 de Nueva York que fue exitoso y que fue bien adaptado en Colombia precisamente por Tito López, de quién me gusta su estilo, coincidimos en la dinámica de presentar la canción de manera seria y no tan gomelo para la época. También está el antagonista de ese estilo serio como el de Alejandro Villalobos, un grande en la radio colombiana, ó como el de Manolo Bellon. No puede faltar un Donnie Miranda como empresario y Dj y quien junto a Tito López fueron los dos primeros Djs en Medellín.

No se pueden perder los estilos de Julio Sánchez Cristo y su hermano Jaime Sánchez Cristo con Otto Greiffestein. Tampoco Alejandro Nieto y Andrés Nieto. Su padre Julio Nieto Bernal lo hacía muy bien.


Yo me quedo con la raíz de la cuál provenimos muchas hojas y ramitas. De toda esta gente aprendí y han aprendido muchos otros. Menciono también a Pedro Sarmiento, quién fue director de Radio Recuerdos pero quizás esta sea una historia que no se aplique hoy en día.



La radio se transforma pero la esencia seguirá siendo la misma.

Raúl Marmolejo en Candela Estéreo (2001).



En su hoja de vida tiene dos entrevistas con personajes muy famosos, la cantante Mariah Carey y Donald Trump quién se convertiría años después en el presidente número 45 de los Estados Unidos. ¿Qué nos cuenta de estas experiencias?

Dirigiendo La X 103.9 en Todelar, teníamos la oportunidad de que las casas disqueras nos llevaban a conciertos y a entregas de premios como los Grammys y fue así como tuve la oportunidad de entrevistar a Mariah Carey que era la diva del momento. En el grupo que íbamos a entrevistarla me acompañaban tres personas de medios de otras nacionalidades. Nos atendió recostada en un diván, en su excentricidad y manejo de imagen, vestida de minifalda muy ceñida al cuerpo, zapatos estileto, cabello ondulado y muy bien maquillada.

Para iniciar la entrevista su representante le dijo susurrándole al traductor que estaba presente que ella tenía algunas preguntas que no aceptaba responder pero que yo podía preguntarle lo que fuera. Yo no era tan atrevido ni osado en esa época y me limite a hacer una entrevista respetuosa, no quise sobrepasarme conservando el estilo de la vieja escuela como había aprendido. A mi regreso a Colombia muchos estaban alarmados porque no había aprovechado y no le había hecho preguntas más atrevidas. Creo simplemente que logré despertar una empatía bonita con ella.


Con Donald Trump no fue tanto por la radio sino que cuando me gradué de la universidad en el año 98 me gané un premio que consistía en ir a una conferencia en Estados Unidos en donde están las grandes agencias de publicidad y Donald Trump estaría dando una conferencia en el Radio Music Hall. Las preguntas eran sacadas al azar y estuve de suerte que escogieron la mía. Yo le pregunté qué cual era la estrategia para uno hacerse millonario. Trump en medio de sus gestos que ahora se han hecho muy populares, me preguntó que si veía una luz señalando una de las lámparas del lugar, yo le respondí que si, a lo que dijo que él la había visto primero y que esa era la manera de hacer dinero, teniendo visión, viendo primero. He escuchado que en algún libro de un publicista norteamericano está publicada esta anécdota de mi pregunta con Donald Trump.


¿Con su trayectoria en la radio comercial cómo fue aquello de qué usted le apostó a la radio comunitaria?


Así es, pero antes de esto, hay una historia que contar.


Para abril del año 2003 se lanzaba -la Cadena de Las 40 Principales- en toda Latinoamérica con la alianza del Grupo Prisa. Antonio Casale me ofreció la dirección de Tunja y yo acepté irme para esa ciudad a manejar esta frecuencia. En Caracol a nivel nacional existía algo que se llamaba buzón de sugerencias y para el lanzamiento de la emisora yo sugerí que se pasara el programa de La W con Julio Sánchez Cristo, de 6 a 10 de la mañana por las frecuencias nuevas de 40 Principales en las ciudades capitales y lugares en donde no tuviéramos frecuencia en AM o en FM. Para el lanzamiento de La W, Julio Sánchez Cristo comenzaba solo en tres ciudades: Bogotá, Cali y Medellín. Mi idea era que se presentara en toda Colombia.

Mi propuesta lo que generó fue la enemistad de mis propios colegas porque de esta manera se acababan los programas de humor y además para ellos era casi que imposible que los jóvenes fueran a escuchar en ese espacio La W con Julio Sánchez Cristo. Yo le aposté tanto que le -metí toda la ficha y Los 40 Principales junto con La W- fueron número 1 en Boyacá. Esto generó que en 2005 regresara a traer los fines de semana de traslado a los 40 Principales a Bogotá y el reconocimiento de Caracol y Julio Sánchez Cristo.

En 2009, mi Dj en Tunja junto a unos amigos licitó una emisora comunitaria y se la ganaron. Yo le propuse desarrollar un proyecto como La X o La W en formato comunitario y logramos que esa emisora rock y pop llegara al tercer lugar porque luchar contra los que pagan las encuestas es muy duro. Pero para nosotros ese tercer lugar significaba como el primero. Superamos a Radiactiva, La Mega y La X 103.9. Concluimos que no importaba ni la frecuencia ni el formato sino el buen contenido al aire. La emisora se llama POSITIVA y todavía sigue existiendo.


En 2012 me propusieron trabajar en otra emisora comunitaria en Bogotá en la frecuencia 94. 4, que no tenía mucho alcance, yo les respondí que si pero a condición de que me dieran libertad de poder hacer lo que había logrado en la ciudad de Tunja. Incluso me ofrecí a trabajar gratis, y así fue, y volví a tener tanto éxito que su impacto fue enorme, además ya existían las páginas en internet y con un productor monté una mesa de trabajo con un montón de gente que también trabajan gratis, tan sólo cobrábamos cupos si los lográbamos vender. Todo esto lo hacíamos por pura pasión a la radio. Además me alié con un periodista del senado y logramos despertar el interés para que una gran cantidad de políticos desearan hablar por esta emisora, el por qué, no lo sé, pero impactamos mucho, además la emisora tenía una programación musical espectacular. Por este trabajo me gané el premio al Mejor Periodista en Radio de ese año. Luego monté una emisora que se llama Smart Estudio que fue la primera emisora online en Colombia con página en internet, en este proyecto me acompañó alguien muy talentoso con la tecnología y así duramos hasta el año pasado y fuimos premiados como la mejor emisora online en el Congreso de la República.



Como hombre de radio le gusta crear, innovar. ¿Qué está haciendo actualmente en radio? ¿Algún proyecto en especial?

Le cuento que vivía muy bien y de una manera inesperada tuve un divorcio en 2019 y eso me ha llevado a reconectarme con mi raíz espiritual ya que de acuerdo a nuestras creencias cuando pasan cosas es porque tal vez uno se ha alejado de Dios y tenía que curarme. Vino también lo de la Pandemia y estoy viviendo una etapa en donde las oportunidades no se han brindado.

Para resumir, estoy desempleado, he tocado puertas en el sector de la publicidad, del mercadeo, incluyendo otras áreas del sector administrativo y por supuesto la radio pero como es obvio vivimos un tiempo difícil. El día que Dios disponga encontraré un empleo.

Me parece que de alguna manera hay gente que se ha llevado una mala percepción conmigo por mis creencias espirituales y con mi vida profesional. Ambas cosas no tienen vínculo alguno y más que prueba, es que he logrado conquistar toda clase de público cuando he hecho radio y desarrollado mis proyectos. Igual, no estaría activo en las redes sociales. En este aspecto yo soy fiel a mis principios y no voy a cambiar por sugerencias de gente que ni siquiera me conoce.


Con el desarrollo y las transformaciones en las comunicaciones muchos personajes de los medios están opinando constantemente sobre la vigencia o desaparición de la radio. ¿Usted desde su experiencia cómo ve la radio a largo plazo?

La radio se transforma pero la esencia seguirá siendo la misma. La radio no se acaba. La radio no tiene clase social y eso es muy importante. Usted no tiene que hacer radio con un transmisor y con una antena, en la Segunda Guerra Mundial, la radio se hacía era por megáfonos, luego vinieron las transformaciones. Un cura en un pueblo la hace en la misa del domingo, ahí informa, pasa comerciales, celebra cumpleaños o conmemora fallecimientos, todo es información. Mucho menos se va a acabar la radio en una sociedad tan desigual como la que se está viviendo en Latinoamérica, no todo el mundo tiene teléfono para escuchar radio, o tiene el interés de informarse por las plataformas sociales, de manera que la radio seguirá vigente, los locutores seguirán teniendo que ser seres humanos que transmitan cosas que le pasen y causen sensibilidad a los seres humanos. Todavía en alta mar o en las montañas la gente se comunica por un radio teléfono. Lo que sí es evidente es que la tecnología tendrá que ser aplicada a la radio para generar mayor alcance y mayor información.

Creo también que hemos retrocedido porque hoy en día cualquiera cree que porque habla por un micrófono ya es un comunicador y eso no es así. Pero ese, no es problema de la radio como tal sino de la educación de los que la hacen.

Desde mi punto de vista me parece que hoy en día es periodista cualquiera y por supuesto locutor también, así no se tenga vocación y mucho menos formación y capacitación en locución. Se maneja mucho lo de las relaciones, de ahí que haya gente sin capacitación, profesionalismo ni mística para trabajar frente a un micrófono. Esto se genera desde la administración de los medios en los cuales le pagan a cualquiera un sueldo y prefieren no pagarle a un profesional que maneje conceptos, porque también se aplica la editorial de los medios ó decir lo que el empleador quiere en medios privados, y que además es absolutamente legal. Esto degradó la radio, el profesionalismo y por supuesto la calidad.


Muy amable

A usted muchas gracias por su deferencia e interés por saber de mi. Si esta entrevista aporta en algo me alegraré muchísimo, de todos modos sé que hay gente mucho más importante en la radio y que le ha dado mucho más a este medio que yo.


A mí me impresionaba mucho el mundo de la imaginación que me daba la radio.

Raúl Marmolejo.

147 views
DSC_0086.JPG

Germán Posada es natural de la ciudad de Medellín (Antioquia). Estudió Locución para Radio y Televisión en el Instituto Metropolitano de Educación (I.M.E). 
  
En Medellín colaboró en el programa Buenos Días Antioquia transmitido por la Cadena Colmundo Radio y participó en la animación y programación del programa Mirador Comunitario a través del Sistema Radial K (Armony Records). Ambos bajo la conducción y dirección del Periodista antioqueño Carlos Ariel Espejo Marín (q.e.p.d). 

 

Desde el 2001 reside en la ciudad de Montreal en donde ha participado en la realización y animación de los programas radiales Escuchando América Latina  (CKUT 90.3 FM), Onda Latina (CFMB 1280 am) y La Cantina (CFMB 1280). 
  

 

bottom of page