top of page

Claudio Gómez: “Ya morí, ya resucité, ya regresé.”

Updated: Mar 21, 2022


Claudio Gómez Holguin. Foto Archivo Personal.




Tiberio Claudio (Tiberius Clauidius en Latin) antiguo emperador romano, fue reconocido por su intelecto, estrategia militar y poderío en el mundo. También fue reconocido por su dificultad para hablar debido a sus trastornos de tartamudez.

Pero a diferencia del emperador romano, un colombiano también de nombre Claudio pero de apellido Gómez Holguín, es un reconocido locutor, con un espléndido tono de voz y una dicción impecable, que dejó huella en el mundo de la locución paisa y lo está haciendo en los Estados Unidos, en la ciudad de Nueva York, en donde se instaló a finales de los años ochenta.


La historia de los formatos de radio musical romántica en Colombia, pero en especial en la ciudad de Medellín, le reconocen su creatividad, trabajo y dedicación, a este hombre de radio que con su voz supo cautivar a la juventud paisa, en una época en la que la balada en español hacía latir los corazones de miles de enamorados. Pero no solamente fue protagonista con la balada en español, también hizo lo propio con la música en inglés, siendo pionero del boom de la radio en FM, que empezó a conquistar otros oyentes ávidos de cambios y propuestas propias de aquella juventud.


Un día, Claudio Gómez Holguín viajó muy lejos, fue uno de aquellos viajes de los que muy pocos regresan, y hoy de vuelta está aquí, para contarnos su historia.




Por: Germán Posada




¿A dónde se remontan sus inicios en la locución?

Mis inicios en la radio prácticamente se remontan desde los 8 años, mi padre fue trasmisorista y fundador de la emisora La Voz del Galeras en Pasto en 1965. Crecí entre grandes locutores y maestros de los cuales aprendí mucho.


En aquella época lo que funcionaba era la frecuencia AM y mi papá se encargaba de los trasmisores de 500 y 10 mil kilovatios que se buscaban en los cerros tutelares de gran altura en donde se instalaban las antenas. Mi padre aprendió gracias a un ingeniero puertorriqueño llamado Gabriel Rico y la primera emisora que se instaló en Pasto, fue La Voz del Galeras, su gerente fue Luis Alberto Ortiz.

Luego de un tiempo mi papá fue transferido a Cali en donde nací y terminé mi primaria y bachillerato. Fui a la Universidad por un semestre para estudiar la carrera de Derecho, pero pudo mas la radio, medio en el que crecí. Aunque mi papá consideraba que la radio no era un ambiente apropiado porque los ingresos no eran muchos y por el ambiente que lo rodeaba como el alcohol, las mujeres, la rumba, etc. Tampoco era fácil ejercer como locutor porque había exámenes que se tenían que pasar por orden del Ministerio de Comunicaciones.


Me inicié como locutor profesional en 1978. Empecé como operador de audio durante el día mientras adquiría practica y luego me dieron el turno de noche. Estuve solo seis meses hasta que presenté el examen para locutor. De 350 aspirantes, 150 pasamos el examen escrito. El examen de lectura e improvisación lo presentamos frente a un comité y solo pasamos 40 locutores licenciados en Cali en 1978.


¿Es reconocido como un experto en baladas, la radio musical en este género musical es lo que lo distingue?

Inicialmente estuve en Radio Eco cuando tenía 20 años. Fui el locutor más joven en ese género de la música del recuerdo. Hacía un programa de tangos a las 3 de la mañana, inicialmente comencé en ese horario porque no tenía licencia de locutor y a esa hora el Ministerio no molestaba. A los que cubríamos turnos entre la media noche y las seis de la mañana nos decían los locutores bombillos.



¿Y luego pasó a Radio Sonorama?

Ese fue el boom. Radio Sonorama anteriormente era La Voz del País, de la familia Lloreda, muy conocida en el Valle del Cauca. Luego pasó a ser de Todelar haciéndose muy popular y famosa con toda esta música romántica y después se estableció en Bogotá. En Medellín se conocía como Radio Familiar luego Caracol copió este género en La Voz de Colombia.

En Radio Sonorama hubo una especie de estampida, se creó un sindicato y muchas de las voces salimos hacia otras estaciones, en mi caso me fui a Radio 1 de música romántica de RCN.



¿Cómo resultó en la radio paisa?

En RCN me pagaban muy bien pero el aspecto radial se manejaba desde Medellín y no había esa posibilidad de funcionar con total independencia. Además, no estaba muy satisfecho con la dirección artística que se le estaba dando. Para la época eran Efraín Arce Aragón y Julio Segundo Villa quienes estaban a cargo y yo quería autonomía desde mi sede en Cali, respetando obviamente las bases de la empresa, pero no se me dio la oportunidad.

En el 80 me fui a Medellín invitado por Bernardo Tobón Martínez para formar parte de los locutores en diferentes emisoras en esta ciudad. Fue una etapa muy agradable en cuanto a la generación del color, la música y el sonido. Don Bernardo Tobón Martínez me insistía que mi tono, improvisación y proyección eran perfectos para la radio musical.


Esta música fue un eje que se formó entre España, México y el resto de América Latina. Muchas de estas canciones eran en inglés y literalmente eran traducidas al español, esa nueva ola española se filtró y pasó por México y Latinoamérica.

Para la época en Colombia fue muy importante cuando Guillermo Hinestroza creó en Medellín el llamado Club del Clan en donde nacieron muchos artistas que se caracterizaron por esa rebeldía de aquel entonces y que luego tuvo la injerencia de la música protesta. Otro referente importante fue Estudio 15 con Alfonso Lizarazo. Un productor y creativo que yo digo que nació en la época equivocada, fue Harold Orozco, la proyección que él le dio a la música innovó totalmente este concepto creando un semillero de grandes artistas que reflejó toda la historia social de Colombia y Latinoamérica.

En Medellín Juancho López con Los Yetis fueron pioneros del rock and roll, al igual que Juan Nicolas Estela.


¿Qué hay de cierto que, siendo director de Radio Musical en Medellín, la competencia eran Radio Disco ZH y La Voz del Cine?

Terminado mi contrato en RCN con Radio 1, me fui para Medellín en 1980, empecé con Radio Familiar de música balada, el director de programación era Ausberto Reinoso. También tuve la oportunidad de hacer en la mañana un noticiero con reportes económicos de Julio Betancur Carrillo gran periodista antioqueño y fundador de la página V.I.P.


Para la época Guillermo Botero Palavecino y Luis Alfonso Velásquez, dirigían Radio Musical. Allí yo empecé con el Programa El Club de Amigos, empezaba a las 8 de la noche hasta las 10, de lunes a viernes y consistía en intercambiar cordones, discos, conseguir novia, amigos, fue toda una novedad, inclusive hasta competíamos con las telenovelas.

También me inventé el programa Taberniando, visitaba las tabernas del área metropolitana y era en directo hablando con los jóvenes. Taberniando se convirtió en el primer programa que interactuaba en directo con la juventud paisa.


Guillermo Botero se retiró y yo quedé dirigiendo la emisora junto a Luis Alfonso Velásquez, quien también se retiró, para finalmente quedar yo como director. Hacía programas de ciclocrós y motociclismo. Prácticamente llegué a tocar el gallinero como dicen por ahí. Tito López y Donnie Miranda, eran los que tenían la audiencia en Radio Disco ZH, y se creó cierta rivalidad, pero realmente la competencia que teníamos formaba parte del rating, no era nada personal, sino que había que crear expectativa y llamar la atención, pero cada uno hacía su trabajo de manera muy profesional.



Usted fue pionero del FM en Medellín en Todelar. ¿Cómo se inició ese cambio del AM al FM?

En cierta oportunidad viajé a Miami y me di cuenta del sonido, calidad y la definición que tenía el FM, pero en Colombia esto era un tabú. En Todelar se aplicaba el FM, pero solo con programas de música ambiental para ejecutivos, yo le expuse la idea a don Bernardo Tobón Martínez, de aplicarla en la emisora con música en inglés y el habló con su padre don Bernardo Tobón de la Roche, pero este no estuvo de acuerdo porque para él, la música americana en FM, era una propuesta descabellada.

Finalmente lo conseguimos, y fuimos la primera estación en transmitir música americana en FM. Fue toda una novedad el FM en 91. 9 Todelar Medellín. La pauta comenzó a funcionar y la idea salió adelante.


¿Pero cómo lograron convencer a don Bernardo Tobón de la Roche al cambio con el FM en Todelar?

En la Todelar de los 70 y 80, la prioridad se centraba en la creatividad, talento, producción, rating y la pauta publicitaria. Los lunes hacíamos -los lunes de radio- en la oficina de don Bernardo Tobón Martínez para aportar ideas, innovar programas con participación con el oyente y trabajábamos en conjunto con el departamento de ventas para mejorar en lo comercial. Las emisoras estilo americano era un eje que había entre Bogotá, Medellín y Cali. Teniendo el rating y el ingreso que estas generaban, y gracias a lo que yo vi en el mercado en Estados Unidos, propuse la idea, pero había que romper con ese molde que don Bernardo Tobón de la Roche, se negaba a ceder con la programación para ejecutivos en FM.


No fue en una, sino en varias reuniones de este estilo, que finalmente logramos convencerlo de que este modelo anglo también generaba ingresos significativos.

Radio Musical, quedó con otro tipo de música y la 91.9, pasó a ser frecuencia de música en inglés. Todelar fue la primera emisora con música anglo que se escuchó en Medellín y yo tuve la fortuna de ser el primer director musical de este estilo.

Este cambio en Todelar creó ese vacío en Medellín en donde Tito López y Donnie Miranda -que eran los reyes de la sintonía en emisoras en AM de música americana-, quedaron prácticamente a la deriva obligándolos a hacer cambios importantes que se vieron reflejados unos meses después cuando debutaron con la exitosa Veracruz Estéreo.


Todelar Estéreo marcó siempre la iniciativa en pauta y rating siendo la número 1 hasta cuando decidí dejarle mi puesto a otras personas que estaban detrás. Considero que lo importante no es llegar a un escritorio sino sostenerse con creatividad, talento y evolucionar. En radio hay que quemar etapas más no quemarse en las etapas.



¿Y por qué luego pasó a Radio Disco ZH?

Mientras animaba desfiles de moda privados y hacía producción para televisión, me llamó Luis Alberto Ortiz, gerente del Sistema Colibrí para llenar ese vacío que habían dejado Tito y Donnie en Radio Disco ZH, emisora que era filial al Sistema Colibrí.

Una vez tomé la dirección de la emisora invité al locutor Ovidio Morales para que hiciera el programa El Club de Corazones Rotos y Solitarios que tuvo mucho éxito. Yo no me quería quemar, no podía hacer todos los programas.


Creo que ese es un error muy grande que muchos lo cometen. Esto es como si en futbol alguien quiere cobrar el tiro y hacer el gol de cabeza. No, uno tiene que delegar funciones y darle a cada uno un lugar.

En Radio Disco ZH dejó huella con ese famoso programa. ¿Cuál es su historia?

El programa que yo me inventé se llamaba El Club de Corazones Rotos y Solitarios que tuvo sus inicios en Disco ZH.

Me inspiré en ese nombre por la canción de Los Beatles, El Club de Corazones Rotos del Album del Sargento Pimienta (Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band). El concepto lo había copiado en México y la idea era hacerlo con un estilo sentimental y se lo ofrecí al locutor Ovidio Morales. Él es un locutor con esa característica de animación más popular y con su estilo hizo que el rating de Radio Disco ZH subiera muchísimo. El programa se hacía con música que yo había comprado en Miami en el Banco de la Música.


Con el tiempo empecé a notar que el propósito que tenían era de cambiar el formato de la emisora con programación para niños y decidí irme para madurar mi proyecto de vincularme con Teleantioquia. En Radio Disco ZH estuve por espacio de un año.

Ovidio Morales tuvo un rating buenísimo. Luego en RCN, Medellín, un locutor llamado Guillermo, no recuerdo su apellido, lo copió con el nombre de La Hora de los Adoloridos, luego en Cali el locutor, Juan Evangelista Salcedo, hizo lo mismo.



En la radio hay que quemar etapas más no quemarse en las etapas.

Claudio Gómez Holguin. Foto: Archivo Personal.


¿Tiene fama de ser un excelente profesional a la hora de promocionar una emisora, cómo lo hace?

Trabajando con la gente. No haciendo radio de clase, pero si hacerla con clase. Respetando mis principios de comunicación, de respeto al oyente y buscando situaciones normales como conocer el léxico, el vocabulario y el comportamiento de cada época.

Hay que estar preparado porque no sabes cuando haces una pregunta qué respuesta te van a dar. Yo viví muchas situaciones en medio de esta dinámica, algunas bastante simpáticas, otras no tanto. También cubría las carreras de motociclismo que se hacían en Niquía, y de ciclocrós en el estadio. Fueron actividades de mucha integración con la juventud.


¿Cuáles fueron sus últimos trabajos en Colombia?

Como director de 91.9 estuve un año y medio hasta cuando se me presentó una oportunidad de hacer televisión y me fui al Canal Teleantioquia para desarrollar una propuesta de hacer un programa de música disco que se llamó Ritmo de Locura. Lo hacíamos los sábados en distintas discotecas de música disco. Allí estuve otro año y medio y luego pasé a ser voice over para la programadora Maya Televisión en donde laboré por espacio de cuatro años, hasta que me vine para Nueva York.



¿Por qué se fue a New York?

En Colombia yo estuve activo hasta 1989 con Maya Televisión y surgió la posibilidad de venir a Nueva York a hacer corresponsalías para el noticiero que tenía Teleantioquia los sábados y que dirigía Antonio Toño Lozada. Llegué a esta ciudad en un verano del 89 para hacer el cubrimiento del 20 de julio de la comunidad colombiana en el Parque de Flushing Queens en New York.



¿Y cómo fue su debut con los medios en los Estados Unidos?

Hice documentales de nuestra comunidad y casualmente me tocó el regreso operación del desierto que fue la invasión a Kuwait por parte de Irak y que USA finalmente replegó las tropas iraquíes, ese regreso lo cubrí por el Cañón de los Héroes en Broadway.

Después de mi experiencia en televisión, vino la creación de una emisora Subcarrier que funciona con la sombra del FM. En la comunidad colombiana fui uno de los pioneros en utilizar este sistema retransmitiendo los partidos de futbol desde Colombia y algunos noticieros. Esto lo hice por espacio de dos años.


Por acá, el alto costo que implica tener una emisora en AM o en FM hace casi que imposible pensar en tenerla y además al comerciante colombiano muy poco le gusta invertir en la radio. En Miami se presenta este este mismo fenómeno.

En Nueva York este sistema Subcarrier, funciona para comunidades que integran coreanos, judíos y rusos.



¿En lo laboral ha trabajado algo diferente a la radio?

Básicamente he estado ocupado en la producción de radio y como maestro de ceremonias. Cuando estaba trabajando para una emisora llamada Radio Beienvenida AM, me contactaron de la emisora de la Universidad Stony Brook, en Long Island, vinculándome a su departamento cultural y sobre todo en la parte de español. Existe mucho interés de otras partes del mundo en conocer el idioma español y la vocalización y locución colombiana gusta mucho.


Los sábados de una a dos de la tarde realizaba un programa en donde hablaba de diferentes aspectos culturales de Colombia. Fue una experiencia muy agradable.

También junto a Ana María Torres fundamos la emisora La Voz de la Gran Colombia, ya desaparecida.


¿Cómo le ha parecido la dinámica de hacer radio en Estados Unidos en comparación a Colombia?

Es diferente. Es otra cultura en donde se debe conocer la reacción y el comportamiento anglo pero también conocer muy bien tu país de origen.

Al llegar aquí ya no se puede hacer radio enfocada hacia una comunidad, inicialmente yo lo hice con mi experiencia de la emisora subcarrier dirigida únicamente a la colonia colombiana pero aquí ya existe la integración multirracial en donde ciudadanos de diferentes países comienzan a convivir entre ellos y se van mezclando. Por esta razón hay que empezar a trabajar de una manera multicultural.

Hay que aprender a hablar de manera que todos te puedan entender. La palabra hermano, por ejemplo, está restringida ya que puede asociarse fácilmente con un culto religioso. Cuando en una colectividad tan diversa como esta se hace un programa que se note que es demasiado enfocado para una comunidad en particular, los otros se sienten discriminados.



¿Cómo es percibido el locutor colombiano en N.Y.?

Un locutor colombiano con trayectoria y nombre es bien recibido sobre todo por su acento neutral. Radio WADO ha sido la emisora tradicional en esta ciudad y el primer locutor colombiano que logró ingresar a ella fue Gerardo Mosquera, un payanés muy preparado intelectualmente. Pedro Vizcaino locutor barranquillero también pasó por aquí. En esta radio han tenido poder los cubanos, puertorriqueños y dominicanos.


Las oportunidades son reducidas porque en la televisión la gente de edad envejece como anchors y en la radio es lo mismo. En Colombia en cambio, la experiencia poco cuenta.

Por acá es muy difícil que te vendan emisoras, las generaciones persisten en todos los géneros. Todavía funcionan emisoras de los 50, 60 y 70 pero con producción y creatividad, que motivan al oyente.

A mí me incomodó mucho cuando desapareció Todelar Estéreo 91.9 y metieron música electrónica. Para mí ese fue el más grave error que cometió Todelar porque esta música es para escuchar en Discotecas y perdieron la orientación que se le debe dar a la radio.


¿Cómo va su salud, me enteré que sufrió un infarto y además un accidente?

Así es. En 2016 sufrí un accidente en una mañana cuando conduciendo un automóvil intempestivamente golpeó mi auto ocasionándome lesiones en las vértebras. Fue muy duro, pero logré recuperarme.

Luego en 2019 una mañana muy temprano me levanté a las cinco de la mañana, para preparar un reporte para el programa Días de Radio, en la ciudad de Cali, para el colega Jaime Echeverri Loaiza. Mientras me duchaba noté que tenía sangre en mi saliva, al principio no le di importancia, pero la salivación continuaba, decidí entonces llamar al 911 y les expliqué lo que me estaba pasando, en ese momento ya no coordinaba muy bien, pero pude salir y esperar hasta que llegó la ambulancia. También llegó la policía.


De inmediato me llevaron a un hospital, aún con dificultad yo pude suministrarles información personal y describir mis síntomas, pero tenía mucha dificultad para hablar. Lo último que recuerdo de aquel episodio es que a eso de las siete opté por rezar un padrenuestro. Lo cierto es que me desperté al tercer día y escuché una canción, abrí mis ojos y era la cantante Luz Aida quien me tenía de la mano y me cantaba.


Me sacaron de un coma inducido, pero volví a entrar en coma. Yo había pedido a los médicos no conectarme a ninguna máquina, pero ellos no me escucharon.

Según me contaron después, me dijeron que había estado varios minutos muerto, pero me reanimaron. Mi vena aorta tuvo un escape hacia el pulmón izquierdo inundándolo completamente ocasionando tener que extraerlo, pero decidieron hacer un experimento y lo lograron salvar limpiándolo. Para detener el flujo de sangre tuvieron que transportar a través de un helicóptero un stent que se encontraba en otra dependencia a distancia del hospital en donde me atendieron. Se suponía que los efectos iban a ser severos y no se sabía en qué estado iba a quedar. Literalmente a Luz Aida la utilizaron como mecanismo para que me hiciera reaccionar y lo lograron.


Después de este segundo coma desperté a los 35 días asombrado preguntando que como había pasado la noche anterior. Luego vino el proceso de rehabilitación, aparentemente no iba a poder hablar. Me hicieron una traqueotomía y el proceso de recuperación fue bastante complicado. Me sometí a una tecnología deportiva y aquí estoy nuevamente al aire, tal como lo canta Willie Nelson en su canción On The Road Again. Todo el 2020 estuve en terapia y mi proceso de readaptación lo hice a través de video encerrado en un apartamento.



¿Después de estas experiencias como ve su vida ahora? ¿Seguirá activo en la locución?

Yo realmente pensé que ya no volvería a utilizar la voz para hacer radio, pero si tenía propuestas como productor y creativo online. De acuerdo a los análisis de los otorrinos había daños severos y hasta ahora no tienen explicación por qué razón estoy hablando. Se supone que apenas tengo una cuerda vocal buena que es la derecha. Así que todo esto es un milagro, todas las mañanas agradezco a Dios.

Ya la vida la veo totalmente diferente, no despectivamente sino con mucho respeto. Ya no me incomoda el frío, el calor, no me quejo por nada, tomo la vida por el lado amable, trato de no enojarme. Lo único es que no puedo correr porque mis pulmones sufrieron mucho de hecho en esta pandemia era un candidato de alto riesgo.

He tenido invitaciones para convertirme al cristianismo pero no he aceptado, lo que hago es que comparto charlas desde mi experiencia, mi conexión con Dios que es cercana, respetando las opiniones y conceptos de los demás y no amargarme la vida porque ya sé que esta ha sido mi segunda oportunidad, ya morí, ya resucité, ya regresé, no se cuanto sea el crédito de vida, no sé si todavía estoy en la sala de espera y en cualquier momento me llamen y me digan nos equivocamos de ficho, a usted le correspondía el número 35 y ese puede ser el mío. Trato de vivir el día plenamente, en paz, sin excesos. Si puedo ayudar lo hago, pero trato de no dar cátedra ni recomendaciones.

Actualmente hago radio online en una emisora multicultural, es una magnífica oportunidad, así que sigo haciendo radio con la responsabilidad que me caracteriza y voy a seguir mientras pueda. Como decía Vicente Fernández, mientras me aplaudan seguiré cantando, entonces yo mientras me escuchen seguiré hablando mientras Dios me de este don, que es la palabra, la comunicación, la expresión, voy a estar ahí. El día que yo realmente no pueda estar frente a un micrófono seguiré desde la parte de producción que es lo que siempre me ha gustado.



Muchas gracias y quedo muy sorprendido por su extraordinario tono de voz.

Recientemente me contactó el que fuera mi jefe en la ciudad de Cali, Luis Fernando Lopera, y se quedó sorprendido como tú. Me dijo que no podía creer que después de mis quebrantos de salud tuviera intacta mi voz.

Son cosas de Dios a quien agradezco y a las personas que ha puesto en mi camino.

A ti, gracias por esta oportunidad. Muchos recuerdos al viejito Donnie Miranda y a Tito Orlando López quien está recluido sufriendo en México en una casa de la tercera edad con piscina incluida, pero hay que acompañarlos espiritualmente para que ellos sigan ese proceso de vida.



Mientras me escuchen seguiré hablando.

Claudio Gómez Holguin. Foto: Archivo Personal.



559 views
DSC_0086.JPG

Germán Posada es natural de la ciudad de Medellín (Antioquia). Estudió Locución para Radio y Televisión en el Instituto Metropolitano de Educación (I.M.E). 
  
En Medellín colaboró en el programa Buenos Días Antioquia transmitido por la Cadena Colmundo Radio y participó en la animación y programación del programa Mirador Comunitario a través del Sistema Radial K (Armony Records). Ambos bajo la conducción y dirección del Periodista antioqueño Carlos Ariel Espejo Marín (q.e.p.d). 

 

Desde el 2001 reside en la ciudad de Montreal en donde ha participado en la realización y animación de los programas radiales Escuchando América Latina  (CKUT 90.3 FM), Onda Latina (CFMB 1280 am) y La Cantina (CFMB 1280). 
  

 

bottom of page