El 4 de agosto de 2018 será una fecha imborrable en la historia del boxeo colombiano.
Eleider “Storm” Álvarez hipnotizaría esa noche a la ciudad de Atlantic City exhibiendo con su técnica refinada que estaba listo para ser el campeón indiscutible de los semi pesados derrotando al pegador ruso Sergey Kovalev, hasta ese día amo y señor de la Organización Mundial de Boxeo.
La paciencia y la constancia de este hijo de Urabá, se vieron premiadas esa fecha con el título que siempre soñó. Colombia entera se siente orgullosa y Montreal no se cansa de celebrar la proeza de este hijo que un día apadrinó.
Días después de haber ganado, Eleider sigue celebrando el sabor de la victoria, pero sabe también que tendrá que trabajar más fuerte aún para que esta sea solida y duradera.
Por Germán Posada
G.P. ¿Se sintió respaldado en Atlantic City?
E.A. Increíble. Inclusive el día del pesaje no sabía que era tan reconocido a nivel mundial. Cuando mencionaron mi nombre la gente aplaudió mucho más que cuando Kovalev se subió a la báscula. Después de la pelea impresionante, no podía ni caminar. Estas son cosas que uno no se imagina nunca en la vida pero pasan.
G.P. ¿Cómo califica la percepción de Kovalev hacia usted desde que se dio el inició del desarrollo de esta pelea por título mundial?
E.A. Kovalev fue muy respetuoso conmigo desde nuestra primera conferencia de prensa. Y justamente hasta el final del combate siempre se dirigió hacia mí con mucho respeto y recalcaba mi calidad como boxeador y del por qué consideraba que Adonis Stevenson nunca había aceptado pelear conmigo. Igualmente yo lo he respetado como campeón que era pero sabía que ese 4 de agosto iba a ser yo.
G.P. Un cuarto asalto complicado en el que Kovalev se mostró agresivo. ¿Qué pasó?
E.A. Yo no me desconcentré pero si quise probar y mostrarle a él que tenía buen mentón. Reconozco que esto fue algo estúpido de mi parte pero contrariamente mi entrenador lo tomó positivamente. Por mi actitud me dijo: “ya demostraste que tienes coraje pero ahora vamos a continuar con el plan que tenemos”. Esta vez lo tomó muy tranquilo porque en otras ocasiones se desespera conmigo. Pienso que esta vez fue la actitud que yo tomé en un combate que sabíamos que iba a ser cerrado y muy duro. La actitud que yo mostré en este combate a él lo llenó de orgullo. Marc es un hombre poco expresivo, como mi papá. Ambos son de ese estilo. Pero estoy seguro que en sus pensamientos a él le gustó mucho mi actitud desafiante de ese día que no la tiene ningún otro boxeador de los que él ha entrenado. Por mi actitud es que yo estoy aquí y eso fue lo que mostré en el cuarto round.
G.P. ¿Se sintió mal, quizás nervioso en este asalto?
E.A. Jamás sentí preocupación. Sentí su pegada. He enfrentado a boxeadores que pegan y el no es la excepción. Sentí su mano cada vez que me pegaba pero quedó demostrado que tengo una actitud de campeón y esa fue una de las cosas que lo hizo frustrar a él porque un boxeador que es pegador cuando no noquea se frustra y sentí su frustración después del cuarto asalto.
G.P. ¿Cuál fue su reacción cuando el equipo de trabajo de Sergey Kovalev le ofreció pelear por título del mundo?
E.A. Con una sonrisa en la cara. Le dije a mi manager que aprovecháramos la oportunidad.
G.P. ¿Lo pensó dos veces? ¿Llegó a sentirse inseguro de una pelea de este calibre?
E.A. Nunca. Siempre me lo preguntaron pero yo he considerado que este deporte es para esto y cualquier cosa puede pasar y yo soy boxeador para enfrentar a cualquier adversario.
G.P. ¿De quién fue la idea de ir a entrenarse a Bogotá para esta pelea?
E.A. Yo le dije a Marc que si algún día teníamos la oportunidad de pelear título del mundo quería irme a preparar a Bogotá. Siempre se lo recalqué a él. También para aprovechar y ver a mi familia y eso fue lo que el equipo hizo. Todo esto fueron motivaciones para mí muy importantes. Así lo planteé, fue muy duro entrenarse allí pero me sirvió muchísimo y hoy somos campeones del mundo.
G.P. Comienza a ser reconocido por su “pegada McIntosh”. ¿Cómo la creó?
E.A. Yo lo creé porque logré noquear de igual manera al boxeador Danny McIntosh y desde allí nació ese estilo de pegada. Contra Kovalev mi entrenador me gritaba de utilizar la técnica de “McIntosh” y cuando la saqué salió muy bien. No me ha fallado. Creo que de ahora en adelante en el mundo del boxeo mi técnica será reconocida.
G.P.¿Y en que consiste?
E.A. Hacer una finta de lanzar un jab abajo y aprovechando un descuido en el movimiento que hace el boxeador en su defensa le suelto la derecha arriba fuerte a la cabeza.
G.P. ¿Se imaginó que había tanta gente esperándolo a su regreso en el aeropuerto de Montreal?
E. A. No me lo esperaba. Yo sólo estaba esperando a unos cuantos amigos y cuando llegué al aeropuerto me dijo la empleada de inmigración que por lo menos me estaban esperando unas cincuenta personas. Son cosas que lo alegran mucho a uno. Volver a ver personas que nos hicimos amigos antes del debut de mi carrera y todavía están aquí conmigo.
“A todos los que han estado conmigo les doy mis más sinceros agradecimientos.”
Eleider Alvarez. Foto :Bob Levesque)
G.P. ¿Qué opina del apoyo que le han dado los medios en Montreal?
E.A. Ha sido extraordinario. Siempre me han apoyado y han creído en mí. Me han dedicado páginas y ahora más. No tengo si no palabras de agradecimiento para los periodistas acá en Montreal.
G.P.¿Y en Colombia?
E.A. De Colombia no ha parado de sonar el teléfono. Siempre he dicho que Colombia es un país en donde manda el fútbol pero igual me han tenido en cuenta.
G.P. ¿Quién puede ser el boxeador mas opcionado para su primera defensa?
E.A. Pienso que puede ser Dmitry Bivol. Es un boxeador joven y rápido, técnicamente muy bueno y es pegador también. Pero yo estoy preparado para enfrentar al que sea.
G.P. ¿No cree que es muy rápido pensar en unificar cinturones?
E.A. No. Yo estoy hecho para grandes cosas y si viene Bivol voy a hacer una buena preparación. A propósito muy pronto comenzaré de nuevo mis entrenamientos porque ahora es que viene el trabajo. Ahora es que viene lo duro. Todos van a querer enfrentar y destruir a Eleider Alvarez De manera que si viene Bivol, bienvenido.
G.P. Lucian Bute a quien usted también le ganó estuvo en Atlantic City viendo su pelea. ¿Qué tal es su relación con el pelador rumano?
E.A. Con Lucian Bute no tengo ningún problema. Lo aprecio mucho. No tenemos una gran amistad pero lo respeto mucho como boxeador. Algunos me dijeron que él había tenido muy buena reacción de mi pelea y que me había aplaudido y eso yo lo aprecio mucho. Porque en este deporte lo que debe haber es respeto y siempre cuando lo veo y lo puedo saludar lo hago.
G.P. Ya todos conocen cuánto se ha negado Adonis Stevenson a pelear con usted. ¿Cuál es su sentimiento frente al boxeador Adonis Stevenson?
E.A. Sentí frustración porque sabemos su historia que siempre declaró que yo era un boxeador que no tenía mucha importancia para el Show Time. Luego cuando HBO me ofreció el combate fue una bofetada en la cara de él y ya luego después de haber ganado el sábado fue otra. Ya he demostrado que estoy hecho para grandes cosas y demostré a Stevenson el porqué el no ha querido enfrentarme.
G.P. ¿Estaría en la mira una pelea con Adonis Stevenson?
E.A. Stevenson nunca me dio la oportunidad que yo me gané. Si ahora él quiere una pelea conmigo tendrá que buscarla y trabajarla él. Yo ya hablé con mi equipo de trabajo y no me interesa pelear con él. El día que el busque una pelea conmigo la voy a aceptar para darle la lección de que no pelee nunca más en su vida.
G.P. ¿Habrá revancha para Sergey Kovalev?
E.A. En la cláusula hay una pelea de revancha con él, vamos a ver si él quiere y bienvenido sea la pelea que sería en diciembre. Yo repito, estoy preparado para esperar al que sea.
G.P. Finalmente su mamá pudo verlo campeón desde el cielo. ¿Qué piensa al respecto?
E.A. Ella nunca se imaginó en que se iba a convertir su hijo. Aquí estoy, soy boxeador por ella y siempre le voy a dar los agradecimientos. Siempre voy a pensar en ella.
G.P. ¿Cuáles son los próximos planes de Eleider Álvarez?
E.A. Me daré un espacio de vacaciones en Colombia y allá mismo comenzaré mis entrenamientos. A todos los que han estado conmigo les doy mis más sinceros agradecimientos.
